viernes, 24 de febrero de 2012

Tellus de mi


Mujer por naturaleza, Soñadora por esencia, Maestra por vocación, perdí la decencia, a ratos pierdo el rumbo, obsequio sonrisas  y  las penas las guardo en mí.
Estas líneas hace un rato las redacte para ese cambio que siento que ha pasado en mi hace ya unos meses, siento que pesan cosas en mi historia pero también que esas cosas que pesan las he decidido cargar con orgullo o quizás con franqueza como alguien hace unos días me mostro que no era bueno ocultar a esos fantasmas que ni por bueno ni malos que fueron son parte del  baúl, no sentir vergüenza de lo que fui de lo que soy aceptando que esta será la lucha que constantemente cargo en mí , pero también reconocer que he delimitado con más seguridad lo que quiero y lo que me gusta hacer sin mentir que aun siento miedo de lo que podría llegarme a suceder.
Sigo escribiendo y no se a que quiero llegar… llamadas inesperadas, tortuosas relaciones de otros que no sabes porque te apuntan con el dedo si ni los msj con caritas guardaste de lo que a ratos el oasis de la vida te pudo llegar a mostrar, revisiones de perfiles y puta que aún me duele cuando pienso en que debí haber desconectado el cable yo, pero son cosas que después te harán reír cuando ya no seas más que un buen recuerdo de esas locuras quinceañeras que viniste a saborear torpemente pasado los veititantos.
Ahora veo las líneas anteriores y digo mujer por naturaleza, porque a ratos creo que soy la única mejor amiga que puedo tener porque nadie soporta cuan lunática , mandona y paranoica mujer he conseguido ser, histérica y demente a ratos poco femenina pero con las cosa necesarias para recordarle a  uno que otro pájaro que vuela bajo que si lo soy, demencial porque afloran cosas que a veces ni yo quiero reconocer que tengo y coquetería que se transforma en next si algo me desagrada, enamoradísima pero desenfrenadamente fría a la hora de que la historia no tiene final feliz, y la vieja escuela me comenta que es porque siempre hago las cosas con el corazón, como cuando era chica sin medir el dolor de saltar del columpio …  alguien diría que soy pasional y quizás sí pero es parte de la mujer que soy y que me gusta porque después no duele tanto el que te arrebaten todo de una vez. Lo de soñadora viene con lo anterior, divago cosas que a veces hasta confundo con la realidad, me escribiría una historia nueva cada día pero a veces prefiero seguir con la que tengo, doy pie a que otros creen historias y lucho por que eso no cambie ya que es lo único que no me hace llorar. Para mí la palabra esencia significa más que una canción de Feliciano que marco mi adolescencia mamona, significa el timbre que cada uno tiene , eso que nos diferencia y que a la vez nos da fuerza para seguir la lucha, otros lo llaman ego o amor a sí mismo, pero como se le quiera llamar es lo que alimenta el alma,  lo que nos permite seguir ahí luchando, sacando brillo a lo que nos gusta de nosotros, puliendo a lo que odiamos de nuestro espejo, maquillando lo que por montones otros han destruido, amaestrando lo que a muchos les cuesta dominar de si, y esperando que pese a esos retoques que uno le da se puedan sentir las mismas ganas de mirar el espejo y decir si, sigo aquí.
Maestra por vocación waaa aquí como que duele es como grande la palabra como que a veces retumba en todos lados cuando dices que eres profesora. También es como raro cuando alguien cree que fuiste profe por toda la moda de estudiar gratis y responden no pos yo soy más viejita soy de la generación que no paso por eso y que ahora recibe cartas de la universidad recordando que tiene que acercarse a un notario para pagar la deudita que tiene con el estado y la universidad, pero los pinches cabrones no borraran ese grato nerviosismo de volver a clases, de ver tu salita llena con niños de reírte de las mil cosas que querrán contarte el primer día,  omitiendo los carachos de otros porque se tuvieron que levantar temprano pero filo cosa de ellos  me gusta lo que hago, mamonamente me permite aun estar en mi casa y sentirme ese personaje medio raro que todos dicen pero como podi? Pero si se puede no eres una tipa tan penca como para no resistir, una cosa es que te quieran tratar como cabra chica, y otra es la que les recuerda la posición que mereces cuando ven pero no aceptan que igual manejas el cuento con algo de seriedad, y así se mantiene la idea que detesto el festival porque me recuerda esos carachos que comienzo a ver el jueves pero me endulza esas sonrisas que veré el siguiente lunes… y para variar de un lado a otro nadie comprende que quise expresar aquí pero no importa si nadie lo lee así que me despido a pausas de mis buenas vacaciones egoístamente pensando en que podrían ser mejores las próximas pero agradeciendo a Dios por su compañía que sentí mucho más de lo normal.